ESTERCO
La naturaleza depreciada y destrozada,
Ha tanto se perdiendo inmensidad,
El verde no se haciendo tan más verde,
Rondándome los espectros y temores,
Renunciamos al cuanto se pudiera
Sin rota, sin camino y sin expectativas,
La sangría de un crepúsculo constante.
Hay prisa en cambiar esa verdad,
Pero el hombre caníbal de sus esperanzas
Derrama su cadáver por tinieblas,
Tramando el final en cada día,
Generando solamente desventuras
Obrando sin descanso, se mutila,
¿Cuándo se dará cuenta?
Del todo quedarán cucarachas,
Y, golondrinas sin posada,
La raza humana, fosilizada entre sus predios.
Quizás, sea, al menos, un esterco para
Que venga la civilización…
RITA DE CASSIA
TIRADENTES REIS
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